La muda es un proceso natural para muchas mascotas, pero para los dueños puede ser un reto controlar el pelaje constante en muebles, ropa y suelos. El aseo regular es clave para minimizar la muda y mantener la casa libre de pelos. Cepillar el pelaje de su mascota al menos un par de veces por semana ayuda a eliminar el pelo suelto antes de que acabe por toda la casa. En el caso de los animales de pelaje grueso o largo, puede ser especialmente eficaz utilizar un cepillo.
Además, mantener una dieta sana rica en ácidos grasos Omega-3 y Omega-6 puede mejorar la salud de la piel y el pelo de su mascota, reduciendo potencialmente la muda excesiva. Si la muda se vuelve excesiva o su mascota desarrolla calvas, es esencial que consulte a su veterinario para descartar problemas de salud subyacentes.